A veces creo que tengo la cobaya más lista del mundo

Sally cada día me sorprende más. Y es que tiene cosas de ser un animal mucho más inteligente de lo que parecía, o de lo que me dijeron.

Que las cobayas reconocen los sonidos que significan que vas a llevarle la comida y te dice que apures pitándote, ya lo sabía. Ya cuando estaba con la madre y los hermanos en el piso de Iris cada vez que se abría la nevera pitaban pidiendo comida.
Cuando la traje, tardó unos días en empezar a reconocer los sonidos de su comida, pero las bolsas de plástico, la nevera y el agua los tuvo controlados muy pronto. Luego ya vino su tupper y las maneras de intentar abrirlo para sacar la comida que le tenía dentro. Últimamente diferencia entre la bolsa del pienso de la del heno, y dependiendo de qué quiera más responde de una manera a cada sonido. Incluso a veces al movimiento que hago para ir a coger la bolsa.
Luego vino la hora de irse a dormir. También lo hace David con su perra: antes de ir a dormir hacemos y decimos lo mismo. Así se acostumbran (o deberían) a que en ese momento toca dormir. Yo me acerco a la jaula con la linterna en la mano (no tengo lamparilla de noche xD), le pongo comida, le recojo el cascabel que le tengo colgado de la jaula (si no se pone a tocarlo y darle golpes y me despierta xD), le doy la buenas noches y le cierro la puerta de la jaula. Normalmente para cuando me estoy metiendo en cama ella se mete en su casita a dormir.
Más tarde vino el vídeo en el que ella abre la puerta de su jaula en mi casa, sin nadie haberle enseñado. Creí que ahí estaría el límite de inteligencia de las cobayas (y mucho me parecía, la puerta está diseñada para que eso no pase), pero hace unos días me di cuenta de que no, de que cuando quiere, aprende.

Hace unos meses, quise enseñarle a hacer cosas, nada complicado. Para jugar con ella y para luego poder fardar de cobaya, para qué negarlo. Una de las cosas más simples que vi por Youtube es que diese una vuelta al darle la orden. La cosa es que le enseñas la comida, le dices “haz un círculo”, la cobaya obedece, y a cambio recibe comida que le gusta. Intenté durante casi 15 días seguidos enseñarle, y nada. Los vídeos presumían de que habían enseñado a sus cobayas en 3 días, como mucho una semana. Y la mía, como igualmente recibía la recompensa de la comida, para qué iba a esforzarse en dar la vuelta ella sola. Ya haré otra entrada contando todas las cosas que hace o no hace por pereza… que también hay para rato.
No conseguí que diese la vuelta. Sin montar un minicircuito no se me ocurría nada más para enseñarle, así que lo dejé estar. Quise también que se pusiese de pie para pedirme comida, pero se apoyaba en otras cosas (en la manga de la mano que sostenía la comida, o se subía a la otra mano) o renunciaba a la comida antes de esforzarse.
Pero un día le dio por empezar a erguirse. Como la puerta de la jaula está en la parte de arriba y la comida entra por el techo, se ponía de pie cuando empezaba a bajar la comida. Descubrió que si se ponía de pie podía comer medio segundo antes que si no lo hacía.
Un día volví a intentar enseñarle a dar la vuelta. Y mi sorpresa cuando empezó a ponerse de pie para pedirme comida. Y estaba tan mona que no pude negarme. Luego cada vez que quería que diese la vuelta se ponía de pie xD E insistiendo un par de noches seguidas, empezó a dar la vuelta :D Lo hizo nada más que un par de veces y no muy convencida, pero ella sola lo hizo. Luego se volvió a poner de pie xD

Y ya lo máximo, que me dejó sin palabras: ya dije que le tengo un cascabel colgado de la jaula. En un principio se lo puse por si le hacía gracia hacer ruido con él, para que se entretuviese. En realidad lo usa para llamarme. En vez de pitar, o de hacer otra clase de ruidos, agarra el final de la cuerda que ata el cascabel con la boca y lo agita. Lo usa de campanilla, normalmente para pedirme comida. Y lo peor es que primero hace ruidos para pedirme comida, la ignoro, hace ruido con el cascabel, y cuando la miro tiene la cara del FUCK YEAH. Cabeza en alto, quieta, mirándome fijamente. A ver cuándo le doy su comida.
Me hace muchísima gracia que use el cascabel para llamarme, no sé incluso si se puede considerar que usa una herramienta para conseguir un fin en vez de hacerlo con su propio cuerpo, y me parece muy inteligente llamarme la atención así, pero a veces se pone pesada y se lo quito. Por ejemplo, cuando se me acaba el pimiento rojo y no puedo darle más pero ella lo quiere, hasta que se lo dé no va a parar. Entonces aparto el cascabel hacia la parte de fuera de la jaula, pero no lo desato porque es un coñazo. Y ella se las ingenia para volver a poner el cascabel dentro para poder seguir llamándome. Que está complicado, pero sacando el morro y mordiendo un poco la cuerda, incluso a veces subiéndose a su casita y tirando desde arriba… lo consigue.

Por el resto, creí que había parado de crecer, pero se ve que no. Ya casi no puedo cogerla por detrás de las patas delanteras con una sola mano (para levantarla, para agarrarla cuando la limpio…), y tiene la barriga hecha un tonel xD Está gordita, gordita.
En Kiwoko tienen una oferta buenísima de una jaula enooorme, pero quería cobrar de la UDC antes de ir a comprarla. Pero la UDC todavía no me pagó (me huele raro, pero todavía no vi un duro, ni a principios de mes, ni cuando hizo un mes que empecé a trabajar en la biblioteca), así que antes de que acaben febrero y las rebajas lo más probable es que vaya a por ella. Cuando la tenga acomodada y demás subiré fotos. Espero que la nueva jaula le guste, va a cambiar un poco su posición en la habitación y a ver si eso no le molesta. Su jaula de ahora está subida en una mesilla de noche, pero la jaula grande va a tener que ir en el suelo. A ver si el cambio de perspectiva le gusta y no me da demasiado la brasa.