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26 de enero de 2011

I Ruta fotográfica por Coruña

Lo mío parece que no tiene perdón. Días sin subir entrada con tantas cosas que contar. El problema esta vez (y es verdad xD) es que tenía tantas cosas que decir que no sabía ni cómo empezar, ni cómo ordenarlas.

Lo primero que quería contar es que el domingo Iris, David y yo hicimos ruta fotográfica por Coruña con las cámaras. Por fin pude probar mi cámara nueva en la calle! No salieron fotos gran cosa, sobre todo las primeras horas (entre el sol y no saber muy bien qué hacer xD), pero la experiencia es algo que me llevo.
Cada vez entiendo menos a esa gente que compra una réflex y pasa años usándola en modo automático porque no se atreven a pasar al manual. Oyee, que la cámara no va a explotar si haces una foto sobreexpuesta!! Solamente te sale mal la foto y ya xD Y tampoco es tan difícil de controlar, es darle vueltas a una ruedita (en el casi de mi modelo, no sé si en otros es diferente aunque lo dudo). Estuve casi toda la tarde con el modo completamente manual (elijo yo diafragma y velocidad), nada de prioridades (tú eliges un parámetro y la cámara escoge otro que le vaya bien). A lo valiente.
Pasamos mucho, mucho frío. Yo iba con tres camisetas, chupa y mitones y aún así tuve frío. Recuerdo que la muñeca izquierda, de sujetar la cámara por debajo y controlar el objetivo se me llegó a quedar tiesa. Ahora creo que tengo un amago de tendinitis o algo, porque al repetir los movimientos me duele por dentro. Pero ya se pasará, como se pasa siempre xD

No nos encontramos con demasiada gente en el camino, o por lo menos gente curiosa. Iris consiguió un robado de un niño pequeño con una bicicleta y unas gafas horribles, estuvimos medio intentando pillar a unos skaters que estaban en María Pita (mi objetivo 18-55 no dio para mucho xD) y un señor me miró mal cuando debía creer que le estaba enfocando a él cuando pillaba la calle entera. Además, en la plaza de Azcárraga (muy bonita, no la conocía) nos encontramos con un indigente borracho que estaba insultando fervientemente a la nada, justo cuando la Policía Local iba a decirle que se comportase. También vimos cómo, cuando ellos se iban en el coche, el borracho asomó la cabeza a la ventanilla del patrulla y les gritó: “HASTA LUEEEEGOOOOO”. Tampoco nos perdimos a las tías escondidas detrás de una furgoneta partiéndose la caja de los gritos del tío antes de que llegase la policía.
Iba a hablar también del espantoso ridículo que hice en plena Plaza de María Pita volviendo del paseo (empezamos en la Calle Real, fuimos hasta María Pita, dimos un paseo por las calles de atrás y luego volvimos), pero es más para ver que para contar. Resumiendo, intenté subirme a un sitio para sacar una foto desde arriba, por el camino me di cuenta de que los pantalones que llevaba no cedían; no podía apoyar las manos porque en una tenía la cámara y la otra estaba al otro lado del sitio a dónde me quería subir; tampoco podía soltar la cámara. Me medio tiré de culo a dónde quería subirme, medio muerta de risa por el estúpido que había hecho, y la cara de incertidumbre de David (creo que no sabía qué hacía yo sentada ahí xD). Al final no saqué la foto desde lo alto xD

Acabamos cansados, de noche y muertos de frío. Tenemos más rutas en mente para hacer por Coruña adelante (Santa Margarita, por ejemplo; e Iris quiere volver al Acuario :D por una vez no tengo que convencer a nadie!!!), así que ésta no será la última.

Y como siempre: las fotos del resultado.

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Arcos de la plaza de María Pita

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Y la que más me gustó de todas:
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El Ayuntamiento en un súpercontrapicado, ya haciéndose de noche.


Otras cosas que tendrían que contar vuelven a ser sobre la Ley Sinde y muchas tonterías que se están diciendo. Pero ahora mismo no estoy cabreada y sino, no mola escribir sobre ello. Esperaré a que den otra noticia/artículo chorra que me haga hervir la sangre y entonces volveré a dar la brasa y ponerme borde.
Mientras, mañana mi primera huelga como trabajadora :D

23 de enero de 2011

Dime algo sucio

Menos de 72 horas me ha durado Dime algo sucio. Y me llevo una sensación rara, pero muy positiva del libro.

En realidad, no es para nada lo que me esperaba. El libro es como un mosaico de vidas, más bien de momentos, en los que vamos conociendo a los personajes desde su punto de vista más oscuro, íntimo y en ocasiones, pervertido. No tiene esa prosa poética que me enamoró de Tres segundos de memoria, pero sigue teniendo ese punto de… desencanto, indiferencia o un pequeño pesimismo en el mundo, pero que a la vez se toma con algo de humor, negro.
A través de pequeños momentos de la realidad de cada personaje vamos conociéndolos, y, aunque ninguno guarda relación con los otros, vemos cómo se van cruzando, de las maneras que menos podíamos sospechar. Algunos se encuentran con los otros de una manera más profunda, o de una manera más decisiva, o de una manera completamente superficial.
Contrasta la inocencia y despreocupación de algunos de los pasajes con la fuerza, brutalidad, y por qué no, perversión de otros. Los personajes son muy contrastados entre sí, sus historias también (aunque hay para dar y repartir). Si algo me llamó la atención de este libro y que no había esperado de él es lo explícito de las secuencias de violencia, y sobre todo, de sexo. Después de toda la poética que rodeaba a esos temas Tres segundos de memoria (sí, es mi libro de referencia) choca leer todos los detalles, las descripciones y la crudeza de algunas escenas.

Y lo seguiré diciendo: me encanta el gallego de Diego Ameixeiras. El gallego normativo estándar que se usa últimamente me resulta indiferente tirando a asquito (eso no es una lengua natural, suena más a laboratorio que el esperanto), pero, al igual que me pasó con la traducción de finales de los '80 (filóloga powa) del Guardián entre el Centeno, éste me gusta. No suena tan artificial, tan traducido literal del español, es una lengua propia, diferente. De hecho, creo que es el único escritor más o menos actual que me produce esta sensación, y el único que no me cuesta leer en gallego, que no me cansa.
En resumen y para no liarme mucho con este tema (puesto que el libro está en gallego, no sé y no creo si se traducirá y tengo pocos lectores de esta zona), me encantó. Cambia de registro, cambia de estilo, cambia de casi todo, pero sigue siendo él.
Y ahora este ejemplar se vuelve para la biblioteca te Filología y me voy a coger otro (no sé todavía si seguiré con los de Horacio Dopico o me iré al más reciente), mientras no consigo los míos propios. Y en cuanto a valoración… no es un libro apto para las lectoras de Federico Moccia, por ejemplo. Creo que con eso lo digo todo.

Hasta mañana, que si sale como tenemos pensado, va a ser un día movido y a la vuelta tendré cosas que contar y fotos que colgar.

20 de enero de 2011

Cosas... sucias

Todos los escritores tienen una serie de motivos a los que recurren. Cada personaje, incluso, puede describirse usando unos motivos que lo caracterizan a él, y a ninguno más.
Un motivo es un elemento recurrente, que define de alguna manera alguna característica propia de un personaje y lo diferencia de los demás. Por ejemplo, ahora que estoy empezando con Orgullo y Prejuicio, Jane se diferencia de Elisabeth en que Jane es mayor; ellas dos se diferencian de las pequeñas en que las pequeñas son un poco maleducadas, indiscretas y estruendosas. Entonces, se podría decir que Jane tiene los motivos de “-irrespetuosa, -maleducada, +mayor” (ya hablo como mi profesora de Gramática...).
Por hacerlo un poco más fácil (y porque estoy hablando de memoria, no he leído nada formal sobre motivos literarios) Winnie Poo tiene como motivo principal la miel. Winnie Poo no es él sin el tarro de miel, o buscando el tarro de miel. De una manera más simple o más compleja, todos los personajes se diferencian unos de otros por motivos.
Cuando escribo (o escribía, viendo la racha que tengo), tenía muy claro esto de los motivos. Y podría hacer una lista de los que uso más frecuentemente, pero es más meritorio que alguien estudie mi obra y los enumere él (por soñar...). Me gusta esconderlos dentro de los relatos, uniéndolos entre sí y dando pistas sobre los personajes, situaciones y experiencias reales mías. Uso sobre todo parecidos entre personajes, situaciones, localizaciones y fechas y horas. Están bastante a la vista, no hay que esmerarse tampoco mucho para encontrarlo.
A raíz de escribir, me planteé en qué motivos podría definirse a mí. Qué cosas digo, hago, tengo, habitualmente, y que me definen. Creo que, como los personajes literarios, aunque de una manera diferente y más compleja, todos tenemos unos motivos recurrentes que nos diferencian del resto. También creo que nosotros tenemos unos motivos para definirnos a nosotros mismos, pero que pueden ser diferentes a los que tiene el resto del mundo de nosotros. Yo puedo pensar que se me caracteriza por mi asombrosa belleza y creerme muy guapa, pensar que eso es algo importante en mí; sin embargo, para el mundo puedo ser más bien fea, o por lo menos ese rasgo no llamar la atención.

Y esto viene a que acabo de coger en la biblioteca uno de los libros de Diego Ameixeiras que tengo pendientes de leer. Y al segundo capítulo me encontré un personaje descrito tal y como me describo a mí misma, o como podría describírseme. Ella y yo no solamente coincidimos en nombre, y aspecto físico, sino que cosas que ella tiene a su alrededor son motivos propios, internos, recurrentes, que uso para describirme a mí misma. Hasta su novio tiene rasgos que pueden definir a David. Tiene algunas cosas literaturizadas en las que no coincido, pero el 90% del mundo que rodea a ese personaje, es parte de mi mundo.
Es una sensación rara. Abrir el libro y medio encontrarme. Y menos sabiendo lo que tengo yo con los libros de Diego Ameixeiras.
Es algo que no he sentido jamás. Y la culpa la tienen los pequeños detalles que hay alrededor del personaje, sino hubiera podido pasar por uno más. Pequeños detalles que no hay manera de que nadie supiese, pero que están ahí, junto a un personaje que lleva mi nombre, piensa cosas que pienso yo, y lo rodean motivos que tengo yo. Cosas tan peregrinas como las ganas que tengo desde hace tiempo como un tatuaje de un cógido de barras (como si hubiera muchos), y que lleva su novio tatuado en la nuca, donde pensé en hacérmelo pero acabé rechazando la idea. Cosas así. No sé explicarme mejor.

Tenía que escribir esto para poder seguir leyendo. No era capaz de concentrarme. Quizás con el paso del libro la voy conociendo un poco más y ya no me recuerda tanto a mí misma, pero la sorpresa/susto me la llevo.

19 de enero de 2011

Biblioteca y pintar con luz

Como sé que debo entrada desde hace unos cuantos días, voy a intentar hacer una entrada rápida. No creo que lo consiga, siempre acabo escribiendo testamentos, pero esta vez por lo menos tendrá fotos.

Ya empecé a trabajar en la biblioteca. Es un poco más difícil de lo que pensé en un primer momento, Filología tiene demasiadas salas anexas que no conocía (como la sala de microfilmes ubicada en un universo paralelo, porque supuestamente ahí está parte de otra planta, o sino el diseño de la biblioteca no tiene sentido; la sala donde están todos los libros de Historia de la música y sobre Cine y Televisión (y yo resignándome a leer literatura que no me interesaba para cuando me aburría, semejante mina tengo ahí dentro).
Mi trabajo es fácil, y al llevar ya casi 3 años en esa Facultad, casi todavía más. La mitad del tiempo que estoy allí coloco libros en las estanterías (hoy me tocaron varios lotes de estos libros de 800 páginas cada volumen, y varios volúmenes; y quedaron más para mañana) y la otra mitad etiqueto los libros nuevos que mandan a la biblioteca, que una vez puesta la alarma y tal, tendré que llevar de vuelta a las estanterías.
En la comida familiar de principios de enero le dije a un primo mío (iba a decir “principios de cani”, pero creo que ya lo es, salvo que mamá todavía le elige la ropa y por las pintas no llama la atención) que iba a trabajar en la biblioteca. Y me dijo “Ay, tú mereces algo mejor”. Mejor? Trabajo sentada, en silencio, sin tratar con el público ni ordenadores, intranets y demás conexiones que nunca funcionan; tengo calefacción y elijo yo mi horario. Y por encima tengo el mejor sueldo que voy a tener hasta que consiga plaza por oposiciones o por academia (por lo menos en relación euros/hora). Sin contar con los “chivatazos” de libros nuevos que van entrando en la biblioteca (hoy etiqueté unos Cuentos completos de Clarín que creo que no voy a acabar Orgullo y Prejuicio, que lo cogí el otro día). Yo dejo caer que faltan varios libros de Diego Ameixeiras, y que a ver si los de Xerais mandan algún ejemplar, aunque sea por publicidad (sé que mandaron folleto con las novedades). Esos libros no llegan a la estantería, oh, no.

Edito: acabo de mirar en el catálogo por internet y ya los tenemos (y creo que todos). Sorry, Austen.

Así que de momento, estoy encantada. No sé si es porque son los primeros días y nos lo ponen fácil a la otra chica y a mí y dentro de un par de semanas empezarán a darnos caña, pero de momento estoy genial.

Y a otras cosas, el otro día, en clase, me di cuenta de que una de las cosas que quería probar con la cámara nueva cuando la tuviese era pintar con luz, y que todavía no lo había hecho. La tarde la pasé con David, pero así que me quedé sola, cogí el trípode, la cámara y un par de linternas que tengo por ahí. No sé cuánto tiempo pasé probando y probando a ver qué pasaba, pero saqué poco más de 100 fotos, de las cuales apenas sirven 20 (es cosa de tener que quitarle el enfoque automático para poder disparar y no acordarme, y andar sacándole fotos a cosas para que luego salgan borrosas).

Y la pregunta es… qué es pintar con luz? O light painting?
Pintar con luz es hacerle fotos a trayectos de luz, de manera que dan la impresión de ser cosas materiales.
Cómo se hace?
El fundamento es el de una foto movida, pero a lo bestia, por decirlo de alguna manera. Cuando una foto sale movida es porque hubo algo encuadrado que mientras el obturador estaba abierto para capturar la luz y sacar la foto, se movió. Aparece registrado en el lugar que estaba antes, su trayectoria, y dónde acabó de moverse. Por eso para sacarle fotos a animales, deportistas, coches en movimiento, etc, hay que intentar sacar las fotos con la mayor velocidad de obturación posible: cuánto menos tiempo esté abierto, es más fácil que no se registre ese movimiento y no salgan movidos.
El light painting hace todo lo contrario: deja abierto el obturador durante mucho tiempo a propósito (yo ayer lo estuve haciendo con 8 y 10 segundos; normalmente disparo entre 1/20 y 1/60 y aún así la cobaya me sale movida) y se mueve una luz para que no quede registrada como un foco de luz, sino una estela de luz.
Luego ya si eres hábil o con más imaginación puedes hacer formas, o aprovechar la idea y hacer efectos de iluminación que de otra manera no se hubieran podido hacer.

Y aquí las fotos que más decentes salieron:

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Éstas son del lightpainting más "puro": simplemente mover una luz delante del obturar abierto. Las luces de las linternas que usé eran blancas aunque salieron más bien azules, y las marcas rojas son del propio plástico de la linterna, que es rojo y medio transparente. Todas se hacen moviendo de diferente manera la luz.

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Ésta no sé si decir que está bien o no. Porque en vez de agitar la luz, intenté pintar en la pared, y en los giros se ven mis manos, las cosas oscuras que tapan parte de las luces.

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Sheldon y la linterna. No contaba con que saliese la linterna, sino solamente la ardilla. La agitaba para dejar cuánta menos sombra posible, pero se me coló dentro del encuadre la linterna xD

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La primera foto de las caras. La cosa es moverse delante del obturador abierto, de manera que haces una foto movida a lo bestia. Aprovechando que podía elegir cuándo me cogía la cámara (a oscuras no queda nada registrado) y que tenía una linterna... jugué un poco.

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Y ya para acabar, una que me salió mal (el rayo de luz que hay se la carga)pero tiene un efecto curioso, y que estuve buscando bastante: la misma cara, diferentes sitios, la misma toma. Para hacerla bien disparadas, te enfocas, apagas la luz, te mueves, te enfocas, apagas la luz, te mueves, etc. hasta que estés contento o se acabe la exposición de la cámara xD Yo lo hice todo, pero me olvidé de apagar la luz antes de moverme, y así salió.




Por lo demás, estoy pendiente de hablar con Iris para hacer este fin de semana una ruta por Coruña ambas cámara en mano, y tengo que hacerle fotos al regalo de Reyes que me hizo David :D Que merece una entrada para él solo, y que a ver si la hago pronto, que casi estamos en febrero.

10 de enero de 2011

Las fotos de los amigurumi

Lo prometido es deuda, y ya debo las fotos de los amigurumis desde ayer. Además mañana voy a entregar los papeles sobre la beca para empezar pronto y antes de contar otras cosas o ponerme en la biblioteca quiero dejar listo el tema de las fotos.
Aunque tenga bastantes figuras, comparado con todo lo que hice no es nada. El pájaro azul grande lo hice y deshice como 3 tres veces, con la lana blanca empecé varias veces amagos de guantes o de algo así, y lo deshice todo. Y aún tenía ganas de más, llevo dos días sin tocar los ganchillos porque estoy sin relleno, y para tener que hacer sabiendo que vas a deshacer… además de que de broma a mi hermano le dije si quería una bufanda, y me dijo que sí. Ahora tengo que hacérsela; un día de estos iremos a comprar las lanas y empezaré con ella. Quién me mandaría, quién iba a saber que su compañera de piso ganchilla y le hizo una bufanda a otro chico que vive con ellos, y no a mi hermano. Ahora me toca a mí xD

Bueno, voy con las fotos.


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A estas arañitas ya las había presentado, creo. A la pequeña todavía le faltan los ojos, estoy pensando en cambiar de color, y mientras no me decido, queda ciega. Alguna fue más un experimento sin patrones que un amigurumi de verdad y consciente, pero estoy contenta con el resultado. No sé si es por la práctica que cogí haciéndolas que es lo que mejor me sale, y prácticamente sin patrones.


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Estas dos son dos… intentos de pasar el tiempo. El pulpo/araña (como es morado casi le pega más ser un pulpo xD) se lo hice a mi padre cuando le expliqué que estaba empezando a hacer amigurumi, porque no se imaginaba cómo podía ser. El de los colores azules está hecho a partir de unas sobras de una lana que compré para hacerme más cuadrados a la colcha xDD No llegó de hecho para todo el gumi, tuve que rematarlo en negro, aunque creo que en la foto no se ve. De todas maneras, el resultado no me gusta, demasiados colores juntos, y las fotos salen mal porque la cámara no sabe dónde enfocar xD


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Están incompletos, por eso parece que no tienen demasiado sentido. Ambos están hechos según un patrón de mierda que encontré y que tuve que volver a escribir (la gente no sabe expresarse, ni siquiera en algo tan básico como “punto, aumento, repetir hasta que haya 24 puntos”). Me gustaba lo que se supone que iba a salir, y aunque no son como esperaba, creo que poniéndole un pico de fieltro (que me falta cortar y añadirle) quedarían como pájaros. La pena que tengo por ellos es que no tengo agujas de lana en casa y tuve que coserle las alas con hilo de coser, y quedó un poco de aquella manera. Para ser una prueba y para ver que puedo hacerlos y más o menos cómo quedan, me llega. También me pasó eso con los ojos del negro, tuve que coserlos con hilo de coser y queda cutre, muy cutre. Pero soy consciente de eso, está hecho sabiendo que iba a quedar así y sé cómo solucionarlo.

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Ésta es la versión en azul de los pájaros. Como quería improvisar un pico, le hice esa especie de boca (me recuerda, no sé por qué al WTF xD) y ya puestos, le puse tres pelitos. Está hecho con una lana casi el doble de gorda que los otros pájaros, así que también es bastante más grande. Me parece simpático, pese a la pinta de agresivo y loco que tiene (creo que es culpa de los pelos xD).


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También con la lana de este último pájaro hice una gota de agua. No estoy demasiado contenta con el resultado, sobre todo porque fue justo cuando se me acabó el relleno y quedó medio vacía, sin contar con que en le pico de arriba improvisé y quedó mal atada; cualquier día se empieza a deshacer.
Aún así, tiene una cara que me encanta xD


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Tras el fail del conejito quise empezar por algo que no requiriese montaje. Tenía guardados unos patrones de setas, y más o menos han salido como esperaba. Es curioso, porque la lana negra y la morada son iguales, de la misma marca, textura y tamaño, y sin embargo, no se comportaron igual al tejerlas. La morada quedó más como debería haber quedado la seta, redondita, y la negra está como más aplastada. Misterios que todavía no sé resolver.
De nuevo, tuve que coserle los puntos a la seta roja con hilo de coser. Tengo los puntos de las otras dos ya hechos, pero hasta que tenga las agujas de lana paso de cargarme más muñecos. Así que espero próximamente poder traerlas acabadas.


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Esto es el fail conejito. Una lana muy bonita, que creo que voy a deshacer y volver a hacer algo productivo con ella. Tenía buena pinta mientras lo iba haciendo, pero a la hora de intentar empezar a ver cómo había que montarlo (ahí tengo cabeza, cuerpo y las dos orejas) perdió todo el sentido, me quedé bloqueada y no pude seguir. Para otra será, cuando tenga más experiencia o esté más inspirada.

Y para acabar, la caja donde voy a ir guardando todo (mientras me quepa, claro). Me la regaló David como envoltorio a su regalo de cuando hicimos dos años (^^). Es preciosa, y espaciosa. No está todo ahí en realidad, solamente tengo las lanas que me llevé durante las vacaciones a casa (la mitad o un poco menos, no cabían más en la mochila xD) y faltan todos los amigurumi, que estaban posando, claro.

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Y de regalo la foto de la chaqueta que le hice a la cobaya. Como estábamos en Navidad la hice en plan Papá Noel. A mi hermano le gustó más que a ella, dice que quiere su bufanda en ese punto, que le gusta.
Pobre, intenté ponérsela un día para hacer la gracia y así como me vio las intenciones empezó a chillar de angustia. No sé qué voy a hacer con ella, pero como gracia no está mal.

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Ya mañana entrego los papeles de la beca y contaré qué va pasar en los próximos días, en cuanto sepa más de mi futuro más inmediato.

8 de enero de 2011

Volviendo a primeros año

Ya hacía un tiempo que no me pasaba por aquí. Tampoco tuve nada realmente que contar, aparte de la beca. No quiero hacer propósitos para el nuevo año, ni un resumen de lo que fue el 2010 (para eso llevo un año escribiendo en el blog, quien quiera cotillearme así tiene que esforzarse un poco más). Los Reyes tampoco hubo que mencionarlos demasiado, sobre todo porque voy a parecer una desagradable desagradecida, y lo que va a pasar después de Reyes también me va a hacer quedar así. No sé si es mejor callarme o explotar, aunque ya tengo una edad para intentar hacerme escuchar (aunque para el mundo en general siga siendo una niña que tiene que obedecer a los padres y hacer lo que los mayores le dicen sin seguir un criterio o intereses propios).
Pero bueno, empiezo a explicarme y a hacer un resumen de lo que fueron las vacaciones, porque a partir de hoy, y aunque haya dos días sin clase, para mí ya no estoy en vacaciones.
No hice gran cosa. Lo que me había dicho de que iba a leer no lo cumplí en absoluto. Leí algo, sí, pero no lo que tenía que leer para clase. Creo que el Libro de Buen Amor y yo no nos caemos demasiado bien (y menos con la edición deprimente que tengo) y solo intenté una página un día. Leí cosas que me apetecían, pero poco tenían que ver con lo que debería. En un par de noches devoré una antología del cuento gallego que tuvimos que leer durante Bachillerato y otro día empecé otra vez con la trilogía de Aquasilva. Leerla entera me puede llevar cerca de dos meses a buen ritmo (son casi 2.000 páginas), solamente quería volver a entrar en contacto con los personajes.
También descubrí que tengo que añadirle matices a la “operación amigurumi” que me marqué hace unas semanas: estas Navidades tejí mucho más de lo que esperaba tejer, y aún así tuve tiempo para hacer y deshacer mil veces, y pasar horas y horas enganchada a los Sims. Cuando esté asentada en Coruña otra vez les haré fotos a los muñecos, pero me llevo unos cuantos bichos nuevos, y una nueva necesidad de lana y algo para rellenarlos. Queda para la próxima entrada :D
La lana blanca que compré antes de venirme a casa por vacaciones está casi acabada, la violeta con la que hice los guantes también está para acabarse, y una azul gorda que compré sin darme cuenta de que era tan gorda (normalmente tejo con un ganchillo del nº4, esta la tejo con uno del nº9) también casi está para necesitar repuesto. Además, para poder acabar los muñecos necesito lana amarilla.
Cuando empecé a probar la calceta le dije a mi hermano de broma que si quería una bufanda. Y me dijo que sí. Yo no sabía que una de sus compañeras de piso le había hecho una bufanda a otro compañero de piso, y no se la daba hecho a mi hermano. Cuando lleguemos a Coruña y tengamos una tarde libre, quedamos en ir a una tienda de lanas de verdad y le compro los colores que quiera para ganchillarle una (intentar hacer algo a calceta es destrozar la lana todavía xD).
En general, estas vacaciones fueron tranquilas. Con la cantidad de lluvia y frío que hubo tampoco es que tuviéramos mucha opción. Fueron contados los días en los que me saqué el pijama, y normalmente fue para recados puntuales: o comprarle verduras a la cobaya para comer, o salir un momento a buscar algo. Mi padre compró una moto (una motaza custom) y un día fui a verla al taller antes de que se la trajese a casa. Otro día me escapé con mi hermano a comprarle el regalo de Reyes, y poco más. Y un domingo me acerqué al mercado a dar un paseo. Tenía intención de salir otra noche a aprovechar las cabalgatas de Reyes con la cámara, pero hubo una tarde tan fría y lloviendo que pasé.
Por suerte, tampoco tuvimos que hacer viajes, como antes hacíamos en Nochebuena y Fin de Año. Nochebuena la pasamos en Coruña, así que no me tuve que desplazar, porque ya me quedé allí. Y Fin de Año, después de media vida protestando por no querer ir a casa de mis tíos, conseguimos hacerlo en casa (con la excusa de que después mi hermano sale). Nada de coche estas Navidades :)
En mi casa no somos de darnos regalos en Nochebuena, cuando era pequeña como mucho me regalaban un libro, pero ahora que cenamos con unos amigos, aprovechamos para intercambiar regalos. Exactamente no es así, sino que se les da el dinero a quien organiza la cena y ellos compran para todos, en plan sorpresa. Este año cayeron pijamas para todos, preciosos, kawaii del todo (ni que lo hicieran aposta ahora que estoy con el amigurumi) de Women’Secret. El mío es gris con un dibujo de un esquimal en la camiseta *-*
Por Reyes la cosa cambió un poco. Mi regalo fue la réflex, aunque ya la llevo usando desde que la compré. Para no estar vacía ese día mi padre me regaló también unos pendientes preciosos, aunque un poco más formales de lo que normalmente los suelos llevar (oro y una piedra lila que creo que es cristal de svaroski). Además, todos los Reyes una tía mía de Barcelona manda regalos. A veces acierta más, otras veces menos, pero este año estoy sin palabras. Sacando cuando, con 15 años, me regaló un pack de braguitas con princesas Disney talle 8 años, que no pude ni probar porque no me subían por las piernas. Supongo que no lo habrá hecho con la intención que le veo, pero sus regalos fueron un abridor de botellas y botes universal (¿?) y otro aparato para afilar cuchillos. Vale, tengo piso propio, uso la cocina, pero también hay más partes de la casa que uso que la cocina. Y mi hermano, que también tiene piso y usa la cocina, le regaló un pen drive. No sé, me dio la sensación de un poco de “las niñas a la cocina y los niños no”, y aunque supongo que no habrá sido con esa intención, tuve una sensación como rara el resto del día. De desencanto, supongo, también un poco de indignación. Agradezco mucho que se acuerde de nosotros y se moleste en enviar los regalos, pero sigo un poco desconcertada.
Y en un par de horas se habrá acabado lo de que no hicimos quilómetros estas Navidades. Todos los fines de semana siguiente a Reyes hacemos comida familiar, y este año toca mañana. Supuse que iba a ser en sábado, pero no, es domingo. Y me jode. Creo que mis protestas son las mismas que las del año pasado o el anterior, no me acuerdo bien. Básicamente, que ya llevo mucho protestado estos últimos días, lo que me molesta no es comer con la familia, eso no me cuesta. Lo que me jode es tener que ir el sábado y quedarse a dormir para el domingo. Si normalmente no quiero hacer eso (la casa en la que me quedo a dormir es de la parte de la familia que peor me cae) este año, además, tengo a Sally. Tengo a Sally, no tengo jaula, me estoy quedando sin heno para ella, y paso de tenerla viviendo dos días en el trasportín, acercándole el bebedero a mano y poniéndole la comida de poco en poco porque mis tíos quieran ser amables y nos inviten a quedarnos a dormir. Otros años protesto porque no me gustan los planes, pero esta vez, con la cobaya, es que no quiero ni pensar en ellos. No creo que mi tía sepa que tengo la cobaya, y no creo que le haga gracia que haya una rata corriendo por su sofá, así que creo que también me puedo olvidar de sacarla para que corra un poco.
Si la comida hubiese sido el sábado en vez del domingo, como tengo tíos de Coruña que también se van a desplazar para la comida, siendo un poco pesada con el tema de la cobaya y tal, supongo que podría haberme escaqueado a Coruña el sábado por la noche. Pero si vamos a estar solos hasta el domingo, no hay liberación posible.
Y como me estoy enfadando por momentos, voy dejando de escribir. Quedan pendientes las fotos de los amigurumi para la siguiente entrada, y supongo que la crónica del fin de semana, cómo fue con la cobaya, la familia y así.
Nos vemos en Coruña :D

3 de enero de 2011

Me acaban de llamar por teléfono...

Me acaban de llamar por teléfono. Un teléfono que no tengo guardado, de más de las 9 cifras habituales. No es la primera vez que me llama un teléfono así, suelen ser de la Universidad. Pensé que serían los de la Oficina de Software Libre recordándome que ya están los diplomas del curso de hace un mes listos, y cogí.
Hola, soy del SAPE… solicitaste una beca para la biblioteca hace un tiempo, verdad?

Hace casi un año que sé que existen estas becas, y llevo desde que entré en la biblioteca de mi Facultad deseando poder trabajar allí. Es una biblioteca grande, con movimiento; una biblioteca de verdad. Tras saber que podía pedir una beca para trabajar allí, no me lo pensé mucho: quería esa beca.
Las convocatorias suelen salir a mediados de septiembre. Tras esperar muchas semanas y peinar todas las páginas posibles de la UDC donde hablasen del tema y preguntar en un montón de sitios, salió la convocatoria a finales de octubre. La solicité. Mi primer currículum, mis primeras mil fotocopias acreditando conocimientos de idiomas y de informática (aunque aquí aún me faltan cursos por hacer para que puedan ser conocimientos oficiales xD), y mi primer gran paseo de edificio en edificio para entregar los papeles (dos fallidos antes de saber que los tenía que entregar en el que queda al lado de Filología).
Se entregaron todos los papeles, y a esperar. Normalmente los becarios empiezan a trabajar (según las convocatorias anteriores) las primeras semanas de enero, y si hay que tener tiempo para poder elegirlos, y luego informarlos… desde finales de octubre les daba más o menos un mes (finales de noviembre, principios de diciembre) para sacar la resolución, aunque fuese la primera donde todavía se podía reclamar. Pasó ese tiempo, y un día unas chicas de mi clase que pidieron beca para departamentos (que es “paralela” a la de las bibliotecas, por decirlo de alguna manera: las convocatorias se abren y se cierran a la vez, incluso solicitas las dos con los mismos papeles y documentación) dieron a entender que habían salido las resoluciones de los departamentos, y no las habían cogido. Supuse que las de las bibliotecas también. Busqué y busqué otra vez por las webs, y no salía nada. Como no me llamaran, ni nadie me dijo nada, supuse que si la habían resuelto ya, no me habían elegido.
Al llegar las vacaciones y no haber noticias de las becas, me empecé a olvidar del tema.

Y el señor del SAPE me acaba de llamar para decirme que estoy dentro. :D Después de ver la cantidad de gente de mi clase con notas superiores a las mías (que cuenta un 70 y pico por ciento el expediente) y que no le daban nada… tengo plaza :D
El horario no lo sé, según la convocatoria tengo que arreglarlo con quien vaya a ser mi tutor/supervisor, y no puede entrar en conflicto con las horas de clase. Viendo el horario de este año, y que no puedo darme de baja en asignaturas, voy a entrar a las 8 de la mañana todos los días y voy a salir a las 9 y media de la noche aunque no tenga clase. A ver cómo hacemos en el parón de clases de febrero y los exámenes y muchas cosas más.
Cuando me dieron la MEC dije que iba a comprarme unas botas decentes. Llevo años queriendo unas New Rock, pero como son muy bastas y bastante caras, pensé que quizás unas Doc Martens. Con esta nueva beca el precio ya me da igual, y a ver si encuentro el modelo de New Rock que llevo amando años (las Reactor altas, las de mujer).


Año nuevo, curro nuevo :D (quién lo diría).